ENAJENACIÓN MENTAL

ENAJENACIÓN MENTAL

Es una denominación de la medicina antigua que no comprende los enfermos de la mente, si no únicamente los que habiendo perdido la conciencia (razón) y la responsabilidad de las propias acciones a causa de una afección psíquica se han vuelto extraños así mismos y por lo tanto irresponsables.

El enajenado es decir el extraño así mismo es un individuo peligroso para si y para los demás; como tal debe internarse en un hospital psiquiátrico con previo estudio.

Existen diferentes tipos de enajenados:

   Agitados

   Melancólicos

   Negativos

   Impulsivos

   Locura grandeza

   Bipolares

Agitados: en un manicomio llama la atención la diferencia en el aspecto y la conducta de los enfermos, a unos se les ve que hablan sin cesar, cantan o interrogan al visitante.

Melancólicos: sus ideas son dominantes, siempre pesimistas sin razón o motivo alguno.

Negativos: su aspecto es otro a veces sentados en la cama con la vista hacia abajo y diferentes, a todo se niegan a contestar, cambian de posición sobre todo cundo están comiendo.

Impulsivos: algunos tienen rasgos como los anteriores, generalmente están tranquilos, pero repentinamente se irritan, amenazan, insultan y pegan en una palabra se vuelven furiosos.

Locura de grandeza: miran con superioridad, pasan satisfechos, se creen ricos y poderosos, etc.

Bipolares: son personas que cabían constantemente su estado de ánimo; debido a su inestabilidad mental.

Para tratar estos enfermos se necesita tacto y sangre fría, en general la enfermera(o) debe tratarlos con dulzura, pero con la firmeza necesaria para mantener sobre ellos una autoridad firme y moral, siempre se debe conservar la sangre fría recordando que en general es menos temible de lo que parece sobre todo cuando se tiene vigilado.